jueves, 18 de octubre de 2012

Mi Paciencia

  Nunca fui paciente, ni consciente de serlo, hasta que conocí a mi hijo. Y como si de la nada apareciera, la paciencia se instaló en mí de forma indefinida y sin fecha de caducidad.

Si, decidí que no se acabaría mi paciencia, hasta que no volvieras.


Me da igual el tiempo que pase y lo que haya en medio, no se acabará.


Estoy ahí, antes, ahora y siempre, esperando a que vengas me da igual la manera en la que llegues a mi.


Yo si estoy preparada, yo si quiero estar a tu lado, yo si quiero saber de ti.


Todos y cada uno de los días desde que no estas conmigo están grabados in mi cabeza, junto con todos los momentos que pasamos juntos durante 32 años.


Hago balance y los buenos ganan por goleada, si, es increíble como cuando pones cada situación, acción o palabra en su sitio, no hace daño solo te hace llegar a comprenderla y lo más importante no deja rencor y deja mucho más tranquilo.


 Y aquí estoy esperándote, no tengo prisa, ni quiero que tu la tengas, solo quiero que cuando vayas a venir para acompañarme a vivir, estés preparado para eso, vivir.

 

1 comentario:

  1. El amor incondicional lo necesitamos todos....gracias....te quiero!!!

    ResponderEliminar