miércoles, 13 de noviembre de 2013

Una barrera menos

Si, hoy he dado un pasito más hacia delante.

Es una verdadera tontería para cualquiera, pero no para mí.

 

Os pongo en antecedentes, con 4-5 años yo no era capaz de pedir un vaso de agua fuera de mi casa, hacia lo que fuera para que lo hiciera mi hermano, que vergüenza, no ha tenido mucha. Yo toda, la suya, la mía y la que sobraba la cogí también para mí. Tal es mi vergüenza, esto continúa pero menos, que creo que he llamado dos o tres veces en mi vida para pedir comida por teléfono. Es más ahora con 35 si puedo, lo evito.

 

Aunque mucha vergüenza, lo que también tengo es una muy buena educación, que, en forma de Pepito grillo a lo largo de la vida me ha ido forzando a superarme. Poco a poco muy poco a poco, no soy yo de prisas.

 

La primera fase, y probablemente la más fuerte fue trabajar en una empresa haciendo encuestas a pie de calle. Esto es lo que se llama terapia de choque, ja ja; y lo hice por que era la empresa de un familiar y me moría de vergüenza solo pensar que le tenia que decir que no soy capaz de hablar con desconocidos, así lo de las encuestas me parecía misión imposible.

Pero lo hice, el primer día fue probablemente de los peores de mi vida, por que además cuando los miedos son irracionales y eres consciente de ello es peor, y no puedes controlarlos.

 

Y desde ese día muchas de las cosas que no hago y no hacia eran por vergüenza.

 

Pero hoy sin planearlo, me he plantado en el comedor de la ofi sola, no aposta claro no se me ocurriría, había quedado con compis que no han llegado, y al no llegar he tenido que hacer el ritual, ticket bandeja, pedir la comida, buscar mesa y compartila yo sola, sin escudarme en nadie.

Suena muy ridículo pero como decía mi padre el miedo es libre y cada uno tiene lo que quiere, y yo tengo bastante. 

 

Y lo he conseguido y no me ha pasado nada, como era de esperar por otro lado. Entonces ahora sentada escribiendo esto creo que soy tonta, por que no he sido capaz de hacerlo antes, pero ya esta hecho.

 

Así que he decidido que no volveré a dejar que pase tanto tiempo, antes de decir que no lo pensaré, e intentaré decir si, o hacerlo. 

 

Me siento taaaan bien.

 

Feliz miércoles.

--


viernes, 18 de octubre de 2013

¿Lo vas a intentar?



Hay formas y formas de tomarse la vida. Creo que ya tenéis claro cual es la mía, ¿verdad?
Pero no siempre es fácil, y hay veces que, no por ti sino por los que te rodean te gustaría poder hacer algo más.
Ese algo más que les haga cambiar el chip, que les ayude a ver desde otro punto de vista su vida, y les haga ver que hay otra forma de vivir.

No soy una inconsciente, tengo días malo y días muy malos, pero claro miro a mi alrededor y creo de verdad que no me puedo quejar, y no quiero ¡ea! , por que con pequeños esfuerzos por mi parte el día a día es mucho mejor. No es hablar por hablar es cierto lo tengo comprobado.
Pequeños gesto que tu haces que se ven recompensados por otros que te son devueltos y a esos me agarro, para sacarle positividad.

No es una tontería, todo lo que das, te es devuelto y a veces multiplicado, por lo que,¿¿ no es más fácil sonreír, y tener una palabra amable para recibir lo mismo y más??

Lo malo viene solo y si es desde fuera está claro que no podemos controlarlo, y recibirlo bien o mal si es tarea tuya.
Así que os propongo que lo intentéis que hagáis un pequeño esfuerzo para poder disfrutar de todas las pequeñas cosas que hacen que un día pase de normalito a maravilloso. Las hay y muchas , solo hay que prestar un poco de atención y las veréis y cuando tengáis unas cuantas os daréis cuenta de cuanto ha mejorado vuestro días.

Feliz Viernes Queridos :)))

miércoles, 16 de octubre de 2013

El otro lado de la llamada

Un pie fuera de la cama y ya estaba pensando en ella y eso no le gustaba.

 Intentaba por todo los medios que su imagen no le viniera a la mente pero era imposible. Su sonrisa destacaba por encima de todo, ella entraba en cualquier sitio y  se notaba.

 

Era su amiga desde hace tiempo, solían salir los cuatro juntos cuando ella estaba con Quique, pero desde hace algún tiempo la cosa no debía de ir bien por que siempre estaba sola, y Sonia y ella pasaban más tiempo juntas.

 

Pero la llamada de la ayer  no se le quitaba de la cabeza. Había hablado con Marta otras muchas veces por teléfono, pero está vez el se sentía distinto. Que tonterías llegaba uno a pensar cuando había poco trabajo que hacer, se había dicho a si mismo al principio.

 

No llego a cuatro cinco minutos como mucho, estaban preparando un viaje de amigos y marta esta siempre dispuesta a planearlo todo y el resto le daban ideas para que fuera ella la que cargara con la responsabilidad de hacernos pasar un gran fin de semana  y siempre lo conseguía , era una chica de recursos.  Tenían pensado pasar el puente en una casa rural recién inaugurada en Segovia. Siempre encontraban una excusa para salir y disfrutar en pandilla, todavía no había niños por  parte de ninguno de los amigos, por lo que tenían que aprovechar mientras eso siguiera así.

 

No sabía por qué,  pero el primer silencio de Marta cuando le dijo quien era y la voz entrecortada cada vez que le explicaba los detalles de la escapada; le había parecido a Carlos de lo más provocativo. Y aunque en ese mismo momento desecho sus pensamientos, le puso otro interés al resto de la conversación. Había algo diferente en la forma en la que Marta hablaba con el, o ¿eran imaginaciones suyas?

 

Dos días, dos días habían pasado desde que hablaron por teléfono y no era capaz de quitársela de la cabeza. No entendía que tipo de truco psicológico había hecho su mente para recurrir a la imagen de Marta todo el día mientras que se le dibujaba una sonrisa tonta en la cara. Decidió no darle más vueltas, no tenia sentido.

 

Hoy habían quedado todos para conocer los detalles del viaje y sería el mejor momento para darse cuenta que llevaba dos días preocupándose por nada, Marta era una buena amiga y nada más. O eso esperaba. Otra vez las dudas

 

 

lunes, 16 de septiembre de 2013

Ahora o Nunca


Pantalones cortos, largos, falda, vestidos, ropa interior; iba repitiendo mentalmente todas y cada una de la cosas de la lista minuciosamente elaborada para que nada se quedara fuera de la maleta.
Cuando era adolescente, en sus tiempos de teatro, la aborrecía pero ahora era muy útil, tal y como decía su padre.

Sus últimos meses estaban siendo difíciles para su atormentado cerebro. Tanta preocupación estaba haciendo estragos a su capacidad de concentración y de memoria, ésta había pasado a ser  ahora las notas del móvil y su cuaderno azul, que llevaba a todas partes.

Ya no sabia si era puro despiste, evadirse de la responsabilidad de pensar o que, pero ella no era antes así, y lo peor de todo es ya no le molestaba, ni olvidar, ni apuntar.

Se había quitado un peso de encima, era más fácil consultar lo escrito que pensar en lo que había apuntado. Además así evitaba pensar.

 

Pensar en aquello que dolía y como no podía afrontarlo, había decidido dejarlo ahí, como si fuera a desaparecer solo. Ingenuidad en estado puro.

 

Desde entonces, solo iba y venia, a cualquier lugar de manera autómata, era tan fácil dejarse llevar. Así llevaba cinco largos meses.

Pero algo, hace unos días la hizo fijarse en un cartel cerca del trabajo que la llamó la atención lo suficiente para dedicar más de los 2 segundos habituales a leerlo lo que allí decía. Sentía eso era aquello a lo que agarrarse y salir, para volver a ser ella, deseando que funcionara de verdad.

 

Media hora después, tenía los billetes en su mail y estaba cerrando la maleta, era ahora o nunca. 

viernes, 13 de septiembre de 2013

Una Llamada

-¿Dígame?. -Hola Marta, soy Carlos, ¿cómo va todo? Me ha dicho Sonia que te llamara par dejar cerrado lo de Segovia.

Silencio.

Se paro el mundo, al escuchar su voz, durante unos segundos que me parecieron eternos. Esa voz la conozco, pero… nunca había sonado así; me gusta.

 

Conocía a Carlos y Sonia desde hace un par de años, teníamos una buena amistad, a la que se unía otra pareja más. Aunque no sé si podríamos definirnos  a Quique y a mi como pareja, después de 4 años no sabia lo que éramos, probablemente siguiéramos así, durante tiempo indeterminado.

 

Sabia perfectamente como era Carlos, no era la primera vez que hablaba con el por teléfono pero está vez algo hizo que mi cabeza volara junto con mi imaginación a sitios no conocidos para mi.

Por que me había costado tanto reaccionar a su voz, por que me costaba respirar y por que cuando colgué tenía la típica sonrisa tonta de mujer ilusionada. Decididamente no volvería a pensar en ello, será que hoy no tengo el día.

 

Por noche tumbada en la cama leyendo, no podía concentrarme. Había estado todo el día tan ocupada que no me había acordado de la llamada, pero  llegó la tranquilidad y volvió mi imagen de desconcierto al oírle. Cómo narices quitarme su imagen y su voz, necesito dormir y ya tengo bastante con mi poco tranquila vida, como para preocuparme por sentir, ups... que digo, que pienso , sentir , no , no puede ser , Carlos es mi amigo , está felizmente casado con Sonia…. Y yo estoy pensando que está impresionante.

Madre mía debo de tener un subidón de hormonas hoy que no me deja pensar con claridad.

Me levanté espantada de mis pensamientos y me fui a la terraza a fumar, tomar un vaso de leche y a esperar que me llegara el sueño profundo para aparcar estas ideas rocambolescas.

 

Esa noche conseguí finalmente dormir, y no pensar en la llamada, la voz y Carlos. Y así  durante un par de días. Aunque de vez en cuando mi mente intentaba llevarme a ese momento yo intentaba engañar a mi mente con algo que hacer.

Pero claro en una semana normal podría ver a mis amigos dos o tres veces, y aun habiendo esquivado el momento, se que no podría alargar el no verle,  ese día llegó y fue el viernes.

miércoles, 14 de agosto de 2013

Días

Hay días que necesitas a los tuyos, que quieres hablar , reir, contar, llorar , compartir.
Esos días en los que los tuyos son los que están ahí siempre, en los buenos días, en lo ratos de risas, en las lluvias de estrellas , pero también, en los momentos de angustia, de lágrimas, y como no de copas.
Aunque no siempre eres capaz de abrazar, querer, y decir cuan importante eres para mi.
En eso días y en todos los demás, en los mejores, en los malos de verdad, en los que dejan huella.
En esos estáis, estamos juntos, por que eso hace nuestra vida, llena de cosas buenas para seguir disfrutando de todo lo que nos queda por vivir.
Disfrutad de la vida con quien de verdad queráis, es lo que nos queda.

Buenas noches. Dulces sueños :))

lunes, 5 de agosto de 2013

Te haces mayor

Te echo de menos, ya me queda menos para verte. Si no fuera por los mensajes y los videos que nos mandan las "abuelas" está vez se haría un poquito más cuesta arriba.

Este año con el campamento y estos 10 días de playa lejos, me están dando la oportunidad de darte recursos para crecer como persona y que a veces no sabemos si lo estamos haciendo o no. Ser padre es muy complicado nuestra lucha interna diaria , es de las cosas más difíciles del día a día.

Libertad, autonomía, son las primeras que me vienen a la cabeza. Pero también responsabilidad, conciencia de ti y de tu alrededor.

No es que ahora cuando te vea dentro de unos días sea ya un chico-señor, no, pero empecé a ver el cambio después del campamento.

Con 6 años y medio, ese medio para ti es muy importante, superaste muchas barreras a la hora de relacionarte con otros niños y no estaba  yo para intentar minimizar "daños" y lo has conseguido tu solo. Has traído tu maleta perfecta, sólo has "perdido"un par de cosas, yo a día de hoy pierdo muchas más cada vez que hago una maleta. Has puesto en práctica, casi todo lo que tu padre y yo hemos intentado enseñarte… y lo has hecho solo, tu.

Me impresiona tu capacidad de adaptación, que tienes con tu edad. Tu capacidad de hacer que todos te tengan en cuenta, que tengan curiosidad por conocerte y cuando lo hacen se queden a tu lado.

Casi todo esto y muchas más cosas que estaría escribiendo sobre ti durante horas, lo estás consiguiendo tu con muy poca edad y entonces me miro al espejo y me siento orgullosa, por que a mi me ha costado más de 20 años hacer muchas de las cosas que tu ya haces de forma natural.

Ahora espero estar cerca tuya para seguir enseñándote y aprendiendo de ti, por que, pequeño tienes tanto que dar, tenemos tanto que aprender de ti.

Y ahora para rematar, estas de "hombre" de la casa. Tengo muchas ganas de achucharte y de que me llames mil veces mamá solo para decirme que me quieres. Y estar dándonos besos mucho rato , jaja.

Contando estoy los días.