Ser madre es especial SIEMPRE.
Por qué cada persona es un mundo, cada hijo es diferente.
Pero sobre todo porque cada una de las maneras de llegar a la maternidad y ser madre es absolutamente especial.
Jamás se me ha ocurrido comparar las maternidades, nunca.
No me atrevería bajo ningún concepto medir que es más bonito, especial, duro, fácil o cualquier otro adjetivo que se quiera utilizar para explicar que es y cómo se siente el ser madre.
Vale ya de comprar, de poner unas maternidades por encima de otras.
Adoro a mis hijos, adoro sus vidas y sus historias que les hicieron llegar a mi.
Soy la mejor madre para ellos y la más feliz porque me han dejado serlo.
Madre, disfruta de tu hijo desde el minuto uno, quiérele, acompáñale, y haz que cada minuto con él en la vida sea tan especial como deseéis.
Pero sobre todo no dejes que nunca nadie te diga qué es ser madre, ni cómo debes sentir tu maternidad.