No se cumplen todos los días y no todos llegaran, llegaremos
a cumplirlos.
Pero si llegas y tienes unos hijos fabulosos te organizan
una fiesta inolvidable. Esto ocurrió el sábado.
Desde hace unos cuantos meses mis primos decidieron que
hacerle una fiesta de cumple 90 a su padre era una maravillosa idea y además
aprovecharon para involucrarnos al resto de familia, la extensa esa que cuando
nos vamos haciendo mayores vamos perdiendo por que claro ya se amplia con los
años, parejas, hijos y claro nuestros padres eran hermanos de una familia de
las de antes, 9 hijos tuvieron mis abuelos y ellos a su vez tuvieron unos
cuantos hijos, las mayores fueron las que dejaron el pabellón más alto. Así que tengo muchos primos y a su vez ellos
tienen una buena media de hijos también.
Y llegó el sábado, que la excusa del cumpleaños del Tio Luis fue fantástica, pero el añadido de que
tantos pudiéramos asistir fue algo que puso la guinda al día.
El cumpleaños fue un éxito solo atribuible a los "Gómez" que se lo curraron a base de bien, lo sabéis os lo
hemos dicho y espero que aceptéis nuestro agradecimiento y nuestro cariño por
haber contado con nosotros.
Y el rencuentro …
No hay palabras. Abrazos, besos y alguna que otra lágrima de
emoción al vernos después de tanto tiempo con ganas de compartir de vernos y
contarnos nuestra vida, ver como los pequeños se dejaban señalar, besar y
contar anécdotas que ellos probablemente no conozcan con buena cara. Coincidir
con aquellos que por la distancia geográfica casi es imposible ver, bendito facebook
que nos tiene a algunos más conectados,
ver a los abuelos disfrutando de como no había nadie fuera de lugar como
cambiábamos de grupo para saber de todos y cada uno de los que estábamos allí.
Creo poder hablar en nombre de todos cuando digo que nos ha
quedado un muy buen sabor de boca, ganas de repetir y yo recojo el
"guante" y prometo intentar hacerlo realidad.
Gracias primos por este maravilloso sábado