Tantos miedos a lo largo de la vida.
Al olvido. Mío hacia ti, tuyo hacia mi.
A no saber estar, a no ser lo que en realidad soy.
Al dolor físico que produce un rechazo, el no.
A no dar todo lo que hay, preservar sin sentido.
A querer de menos y recibir de más, correspondencia.
Al silencio entre dos, un vacío enorme.
A los futuros que no existirán, anticipaciones.
A qué tú amor no pueda con el resto, tirar la toalla.
A no saber quererte como te siento, no dar todo lo que hay.
Tantos miedos.
Tenemos los que nacen con nosotros, algunos desaparecen cuando creces, otros los llevas toda la vida , otros los vas recogiendo por el camino.
Los hay que han sido pasados por nuestros padres, los que copiamos inconscientemente de quién nos rodea o de quienes queremos.
Qué duro es reconocerlos, porque nos hacen vulnerables, y duelen. Pero también paralizan y no dejan vivir. No dejes que pase.
Ahora lo sé , ya no los quiero conmigo.