Mírate, conócete, quiérete mucho, cuídate y sobre todo no te hagas daño.
No seas condescendiente con quién no lo merece.
No rechaces tus actitudes por complacer a otros.
No te pongas detrás o debajo de nadie, como mucho al lado y solo si lo merece.
No eres menor que nadie pero tampoco superior.
Solo sé tú y con eso no haces nada malo .
No te hagas pequeña por encajar.
No hagas nada que tú no harías por tí mismo para que te tomen en cuenta.
Di no, cuando sea necesario, cuándo te lo pida el cuerpo.
Exprésate libremente, es tan valiosa tu opinión como la de cualquiera.
Qué el miedo no te paralice.
Qué el dolor no te haga dar un paso atrás, solo uno para delante , para que no vuelva a doler.
Y no dejes de creer en ti nunca, por favor.
Aunque parezca imposible, todo pasa.