Mi mitad. El hombre de mi vida. Y probablemente la persona que mas he querido nunca.
Y pasan los días, los años y te recuerdo,  te recordamos tanto. 
Siempre hay una conversación,  un gesto,  un viaje,  una foto,  una frase que nos recuerda tu vida con nosotros. 
Te añoramos mucho y mucha gente. 
¿Te das cuenta de la huella que has dejado?  
Ya no hay tantas lágrimas,  ahora tu recuerdo es nostálgico,  sereno, bonito y nos hace darnos cuenta que pensarte con una sonrisa es más reconfortante. 
Sigue siendo difícil,  no lo voy a negar,  te estás perdiendo tanto y tan bueno de todos los que te queremos. 
Nunca superas que alguien querido se vaya y si encima llenaba todo a su paso se complica pero son tantas las cosas buenas que nos dejaste para recordarte que lo hacemos,  mucho, casi a diario y eso nos permite continuar viviendo siendo felices y disfrutando. 
Te quiero,  gracias por darme tanto papá