Lo de querer

Quiero besarte todos los días. 

Rozar tu piel disimuladamente, para que notes mi presencia. 

Quiero mirarte mientras duermes. 

Aprenderme todos y cada uno de los lunares de tu cuerpo. Creo que tengo para años.

Quiero no echarte de menos .

Verte sonreír y reír con mis cosas sin sentido.

Quiero pillarte mientras me miras cuando crees que no me doy cuenta. 

Hacer planes contigo, o no hacerlos, solo estar.

Quiero quererte mucho y bien.

Estar siempre que queramos. 

Vamos, lo de querer de toda la vida.

Tristeza

Soy yo el mismo de siempre, pero vacío.

No recordaba tan nítidamente como se siente alguien perdido.

Necesito llorar mi tristeza. 

Ha llegado y va acompañarme una temporada, lo sé, lo siento.

Solo es tristeza, no quiero que sea cansancio, desesperanza, olvido, pena o indiferencia.

Estoy triste porque dejó de funcionar. 

Porque los esfuerzos fueron en balde.

Porque perdí el tiempo esperando.

Porque no siempre, dos personas quieren el mismo camino.

Porque querer sin esperanza, gasta.

Porque tirar tanto, rompe cuerdas.

Porque sé ha esfumado el futuro.

Porque no quería llegar al final.

La lista

Todo empezó como una broma.

Apuntad las conversaciones pendientes, por falta de tiempo, de oportunidad, de espacio.

Pero el tiempo pasa y sin quererlo tiene cosas que nunca serán.

Necesidad, ganas, oportunidad.

Veranos e inviernos.

Noches que se alargan hasta el desayuno.

Vacaciones y también rutina.

Amigos, familia.

Tiempo sin límites.

Planes con amaneceres.

Atardeceres eternos. 

Una suma de dos.

Caminos comunes juntos.

Presente, pero sobre todo futuro.

Un nosotros. 

Nuestra lista interminable de imposibles.

La montaña

Me acuesto pensando en sí mereció la pena, si hoy, ahora , todavia merece la pena.

No lo sé, no lo tengo claro.

Es la primera vez que las decisiones se amontonan, no veo con claridad. 

No todo es blanco o negro.

Pero no hay nadie, no lo veo , se ha perdido.

No he dejado de tirar, aún creo que lo sigo haciendo , pero también las fuerzas flaquean.

Ya no son las mismas, están mermadas por la ausencia, por la indiferencia , el silencio.

No hay uno solo tiempo en el que se termina, no hay una sola cosa que desencadenan.

Es la acumulación , la montaña de cosas sin resolver que un día cae, se desmorona y se lleva por delante todo sin importar, pasado, presente y futuro.

Y entonces, ¿Qué? 

No se, todavía sujeto la montaña.

Acompáñame

Ven, dame la mano y vayamos juntos.

Dónde no haya nada explicar, dónde solo estar sea suficiente.

Quiero que vengas conmigo  a nuestro futuro, solo tengo una parte y necesito la tuya para completarla.

No sé dónde nos llevará, es algo que habrá que descubrir poco a poco , día a día, como desde la primera vez.

Sería una primera vez sin fecha de caducidad ¿Quieres?

 
Hacer cosas que no hemos hecho antes o las hicimos solos.

 
Poner palabras, nombre, al camino que nos queda por recorrer.

Descubrir cuál va será nuestra forma de hacer y vivir.

 
Una forma de empezar diferente, pero contigo.

Creo que no hay nada que me apetezca más que eso.

 

¡Qué locura!

No hay momento un solo momento de calma

Desearte cada minuto.

Soñar con tus besos.

Anhelar tu manos.

Pensar en el roce de tu piel.

Hambre de nosotros.

Miradas que cortan la respiración.

Un te quiero fuera de tiempo.

Suspiros de más.

Añoranza del tiempo pasado.

Ansia de momentos juntos.

Antojo de ti.

Echando la vista atrás

Hubo cosas que anticiparon los hechos. 

Tiempos que dejamos pasar.

Cada vez más silencios.

Menos momentos y conversaciones juntos.

La vida, el trabajo, los problemas. Excusas.

Planes aplazados.

Distancia social.

Emociones ocultas.

La familia, el estrés, agotamiento. Más excusas.

Días grises en bucle.

Separación física.

Olvido consciente.

Ya no puedo más. No quiero ésto. Se acabó.

Ya no hay excusas.