Querer siempre es bueno.
Querer.
Como , cuando y a quien quieras.
Amigos, hijos, parejas , familia.
A tí. Este es probablemente el querer que más nos cuesta.
Querer te hace mejor.
Querer te hace feliz.
Querer te hace sentir increíblemente bien.
Y si dejas de querer, quiérete más a tí, para que quede el recuerdo, lo bonito y lo que nos llenó.
Quiérete más a tí, y que lo malo pase rápido y ese querer vivido se quede solo como una historia más de las miles que llenan nuestra vida.
Pero quiere, siempre.
Querer nunca está demás.