jueves, 17 de noviembre de 2022

Cualquier día

Los nudos en el estómago no se llevan bien con la tranquilidad y paz mental.

Incompatibles.

La falta de decisión es muy mala para despejar la mente. 

Y no tomar partido es lo peor para tu estado emocional.

Así que, o tomas la riendas de tu vida o bienvenido a una maravillosa montaña rusa de emociones.

Un sube y baja que no te dejará descansar ni por las noches, te acompañará un sentimiento de culpabilidad difícil de quitarse de encima y una sensación de agotamiento extremo que te convertirá en una persona con un muy mal humor.

Tiene solución, por supuesto y además está en tú mano. 

Pero tienes que querer hacerlo para superar cada uno de los escalones que te has ido poniendo para retrasarlo, a saber por qué maravillosa excusa.

¡Vamos! Ya queda menos.

Ya sabes lo que hay, el problema y lo mejor, la solución.

Es cuestión de ponerse. 

No tengas prisa, pero no te olvides, no te obsesiones pero hazlo. 

Sabes que es la única manera de seguir bien. 


lunes, 14 de noviembre de 2022

Ponle fecha


Una y otra vez a ese sitio en el que fuimos nosotros 

Enredados en las sábanas, hablando, riendo.

Contando todo lo que se quedó de la última vez, que siempre es mucho.

Una caña, un cigarro, una cena.

Parece que no pasa el tiempo. 

Y seguimos.

Planes de vida, expectativas y más pendientes para la próxima.

Un agujero en el espacio-tiempo de esta vida que corre tan rápido, dándonos oxígeno, ganas , sonrisas, respiro.

No hay más, solo eso.

Solo eso, que nos da el punto de anclaje para seguir compartiendo. 

Da igual cómo, cuándo, dónde, solo compartiendo.


jueves, 10 de noviembre de 2022

Sin gotas

No ha pasado nada, o a lo mejor es por eso.
 
Muchos nadas en mucho tiempo.

No es el momento. Ni el día, ni el lugar.

Pero ya no caben más gotas, rebosó.

¿Hubo tiempo de respuesta? Es posible, pero ya da igual .

No te quiero a mi lado, no quiero saber de ti.

Tu cercanía me hace daño, tu lejanía es aún peor.

Tu compañía que en principio me reconforta, se torna dañina por momentos.

El cuándo, cómo y porqué han pasado, no tiene un identificador claro. Es un cúmulo de cosas. 

La primera vez que algo no te gusta y callas. 

La primera decepción y sigues callando. 

Callas hasta cuándo empieza por tí la conversación.

Así que cuando se acumulan silencios, un día la bolsa se rompe de llena que está.

El no eres tú, soy yo, más usado puede también valer. 

Soy yo, que ya no aguanto más.



lunes, 7 de noviembre de 2022

Mentirnos

Una vez más.

Me quiere.

No quiso decir eso.

Hay mucho trabajo.

No te preocupes.

No es para tanto.

No exageres.

Se me olvidó.

No, eso no es así.

Había sido un día agotador.

Nosotros no éramos así.

Lo nuestro es diferente.

¿De verdad me preguntas eso?

No pensé que fueras así.

Y así sin querer verlo, leer la realidad nos resulta insoportable y es, en ese momento, en el que lo tóxico, ya se ha adueñado de ti.

Nos mentimos, otra vez

lunes, 31 de octubre de 2022

Espejismo

Tienes la habilidad de cambiar mi humor.

De convertir en sonrisa hasta el día más oscuro y gris.

De hacer que me duerma soñándote. 

De pensarte sin pensar.

De olvidar lo que duele.

De que las horas vuelen.

De mirarme y verme, verme bien.
 
De creer que puedo.

De sentirte a kilómetros.

Pero no es cierto, es solo una ilusión.



domingo, 30 de octubre de 2022

Condicional

Si me quieres todavía. 

Pero si no lo haces también quiero saberlo.

Si me echas de menos o si ya no hay nada que te haga recordarme.

Si piensas en mí.

Si hubieras cambiado como tratarme.

Si podríamos haber hecho algo más.

Si había futuro.

Si mereció la pena.

Si volverías a repetir.

Si, si, si .

No hay respuestas. 

¿Y si las hubiera?

jueves, 27 de octubre de 2022

Hoy

Desde qué he abierto un ojo a las 6, ya sabía que no iba a ser bueno.

No ha pasado nada malo, pero me va el drama ya lo sabes.

Pequeñas cosas que no puedo controlar y eso me inquieta, molesta y hasta me cabrea a partes iguales.

Y entonces es cuando necesito hablar.
Pienso muy bien la llamada, es muy pronto. 
Llamo y no hay respuesta.

Empieza la rutina, que últimamente es rápida, llena de incidencias, pendientes y mucha responsabilidad.

Y cada vez me siento más cargada.

El ritmo no para y yo debería hacerlo pero no es buen momento.

Y llegan los cambios.

Hoy se materializa uno que hará que el espacio que he ocupado durante 15 años cambie, con todo lo que ello conlleva. 

Y de repente he sentido vértigo.

Necesito gritar, ahora hablar se queda corto .

Me doy un respiro, puedo con el cambio, lo haré a mí ritmo. Además se que es bueno y que será mejor.

Pero el día no termina, quedan las responsabilidades. Las que nunca abandono, ni relego, ni esquivo aunque me cueste como hoy, la misma vida .

La recompensa es maravillosa, la sonrisa de mi hijo, su felicidad, por encima de todo eso es lo importante.

Me dejo mil pequeños detalles que en cualquier otro momento pasan desapercibidos, pero que hoy me han dejado marca, me han pesado, casi pueden conmigo.

Eso sí, todo hubiera sido infinitamente más fácil si hubiera contado contigo.

 Pero para eso tenías que haber estado y yo saberlo.

¿Estás? 

No, creo que no.