Nunca pensé que la piel tuviera ganas, deseo.
La mía la tiene, por tí.
Cuando te siente cerca, se alborota, se enciende, podría decir que tiene vida propia.
Si pasas rápido a mi lado, se eriza echándote de menos.
Si te acercas mucho, se expande como si quisiera atraparte.
Si la hueles desprende todos los olores, que he empezado a asociar contigo, por qué solo tú los provocas.
Si la tocas con los dedos, puedo sentir las huellas y como se pegan a ella.
Pero si es tu boca , tu lengua saltan las alarmas, empiezo a perder la cabeza, necesito más contacto.
Y si es tu saliva la que la moja en uno de esos besos que nos gustan, has ganado la batalla.
Y ya solo soy capaz de sentir a través de ella, de una piel que te es fiel, que te echa de menos,que se ha hecho adicta a ti, que te desea de manera desesperada.
Mi piel.